El Presidente de la Misión Europea, Joseph F. Merrill, le pidió a uno de sus misioneros retornados preparar un breve informe para el Presidente Heber J. Grant respecto a los asuntos de la misión. Mientras el misionero, Gordon B. Hinckley, entraba a la oficina de la Primera Presidencia, se le dijo que tendría quince minutos para exponer el informe. La entrevista duró una hora y quince minutos, y los Hermanos estaban tan impresionados con los talentos y habilidades del joven élder que algunos días después, se le ofreció el puesto de secretario ejecutivo del Comité de Radio, Publicidad, y Literatura Misional de la Iglesia. Gordon B. Hinckley empezó una vida de servicio a la Iglesia.
Flake, Lawrence R., Prophets and Apostles of the Last Dispensation – Profetas y Apóstoles de la Última Dispensación (en inglés), Centro de Estudios Religiosos de la BYU: Provo, 2001, pp 241-242.
yo entre ala iglesia en el año 2000 cuando el era profeta,y las cosa que mas me gustaba era su manera de llegar ala familia nunca me olvidare que yo siempre seguia sus consejos, y cundo el fallecio me dolio tanto que hasta ahora no puedo asimilar,tngo el gusto de haberle puesto a mi hija el nombre de su esposa marjorie yo esperaba que mi hija sea hombre para ponerle el nombre del profeta ,pero nacio mujer igual la amo mucho,ahora me he alejado de la iglesia pero ya estare regresando recuerdo que yo soñe que ibamos caminando abrazados, nunca me olvidare de eso, ojala lo pueda encontrar cuando me vaya de esta vida para darle las gracias por todo lo que hizo jose luis