Bautismo

“Algunas personas se preguntan por qué no aceptamos el bautismo de otras iglesias.No se realiza en la manera apropiada y no es llevado a cabo por la debida autoridad.Y entonces, cuando un converso viene a esta Iglesia, debe ser bautizado en el nombre de Jesucristo, por inmersión, por alguien que posea el debido sacerdocio…. Qué cosa maravillosa es esa, saber que a similitud de la muerte, sepultura y resurrección del Hijo de Dios hemos bajado al agua, se nos ha sumergido en el agua y se nos ha sacado fuera del agua.El bautismo es una ordenanza grandiosa, sagrada y maravillosa que trae consigo la remisión de pecados, pero en una mayor medida, es simbólica de la muerte, sepultura y resurrección de nuestro Divino Redentor”.

(Charla Fogonera Copenhagen Denmark, 14 Junio 1996).